Nombre completo: Díaz, Octavio Juan
Apodo: Negro, Oso
Lugar y fecha de nacimiento: Rosario, 7 de octubre de 1900
Lugar y fecha de fallecimiento: Rosario, 12 de noviembre de 1977
Puesto: Arquero
Debut oficial en Central: 30 de marzo de 1919, vs. Central Córdoba 4-1 (V)
Último partido oficial en Central: 16 de agosto de 1931, vs. Central Córdoba 2-2 (V)
Partidos jugados: 131 (95 G-17 E-19 P) (Titular: 131) (datos incompletos)
Goles: 0 (102 recibidos, 65 vallas invictas)
Penales que le ejecutaron (sin contar definiciones): 12 (2 atajados-1 desviado-9 convertidos)
Expulsiones: 0
Etapas en el club: 1919-1920, 1923-24, 1925-31
Títulos: Copa de Competencia AAF 1920, Copa Nicasio Vila 1919, 1923, 1927, 1928, 1930
Selección Argentina: 11 PJ (12 recibidos)
Uno de los futbolistas legendarios del club, hijo de Juan Díaz y sobrino de Zenón, luego de formar parte de las divisiones juveniles de Rosario Central, al no encontrar lugar para jugar en primera, debutó en el Club Atlético Sparta de Rosario en 1917.
En 1919, retornó a Rosario Central para ser finalmente el guardavallas titular. Allí disputó al menos 131 partidos (hay que tener en cuenta la falta de cierta información sobre la época), ganando un título nacional oficial y varias ligas y copas rosarinas de primera. Jugó junto a su tío Zenón en el último partido de éste, frente a Newell's el 4 de abril de 1919; en dicho encuentro Octavio le detuvo un penal a Atilio Badalini, mientras que en los últimos minutos le cedió el puesto a su tío, fatigado físicamente. Ese año obtuvo su primer título con el canalla, la Copa Nicasio Vila 1919, y fue subcampeón de la Copa Ibarguren y de la Copa de Competencia. Sus destacadas actuaciones en el cuadro auriazul le confirieron sus primeras convocatorias a la Selección Argentina.
En 1920 Rosario Central obtuvo un nuevo título nacional para sus vitrinas, la Copa Competencia de la Asociación Amateurs de Football, pero Díaz fue titular solo en el partido de octavos de final ante River, el 22 de agosto. Ese fue su último partido en Central en su primera etapa ya que al haberse desafiliado el club de Arroyito de la Liga Rosarina, Díaz necesitaba estar fichado en un club que sí lo estuviera para poder seguir jugando en el elenco nacional. De esta manera, sobre fines de agosto y con la desafiliación de Central de la LRF, Octavio dejó el club auriazul y se fue a jugar a Central Córdoba. Completó 7 encuentros y marcó 2 goles (ambos de penal) con el club del barrio Tablada.
A principios de 1921 pasó a Rosario Puerto Belgrano, donde jugó hasta 1922 inclusive. Volvió al canalla en 1923 luego de la reafiliación a la LRF del cuadro de Arroyito, donde coronó varios títulos locales. tras obtener la Copa Vila de 1923, en 1925 fue prestado a Boca Juniors durante la gira europea que realizó éste equipo. Luego de aquel préstamo por el club de La Ribera, volvió a Rosario Central, donde siguió cosechando títulos oficiales y distinciones personales, constituyéndose en el futbolista rosarino más popular de la época; obtuvo la Copa Vila en otras tres ocasiones (1927, 1928 y 1930). Integró además el primer plantel de Central en la era profesional del fútbol argentino, en 1931. Su participación en la dinastía de los Díaz en el Central de las primeras décadas, sus dotes de guardameta seguro de manos, gran golpe de vista e imponente presencia y el estrellato alcanzado a nivel nacional lo convirtieron en una de las leyendas del club.
El año 1932 marcó su última experiencia como futbolista, al jugar en Atlanta, club que esa temporada había contratado a más de 60 futbolistas, entre ellos 9 arqueros, por lo que el paso de Díaz por el bohemio fue acotado en cantidad de partidos.
Siempre destacó a Serapio Acosta como su maestro y modelo a seguir.
Con la selección Argentina en total disputó 11 partidos. Jugó el Campeonato Sudamericano Chile 1926, logrando el subcampeonato, y el Campeonato Sudamericano Perú 1927, coronándose campeón. También jugó en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam 1928 obteniendo la medalla de plata. La revista El Gráfico en su publicación del 27 de agosto de 1927 lo declaraba indiscutible titular para el elenco nacional, destacando como insuperables su serenidad de ánimo, seguridad de manos, golpe de vista y arrojo.
Sus primeros partidos fueron en 1920 ante los uruguayos por las copas Honor Uruguayo y Newton. Entre 1926 y 1928 disputó dos campeonatos Sudamericanos, la Copa Lipton y el encuentro semifinal de los Juegos Olímpicos de 1928 ante Egipto, en el cual contuvo un penal. Antes de este certamen atajó en un amistoso en Portugal que se constituyó el primer partido para el elenco argentino en Europa.
Estuvo preseleccionado para integrar el plantel que afrontaría la Copa del Mundo Uruguay 1930, pero finalmente fue desafectado como castigo a liderar una huelga de futbolistas en Rosario.
Con la selección de la Liga Rosarina ganó el Campeonato Argentino Interligas 1929.
Participación por torneo (datos incompletos)
Detalle de partidos
El Negro en plena acción.
Díaz aportaba plena seguridad bajo los tres palos.
Gozó de gran popularidad, tanto que fue modelo publicitario.
Reconocimiento en el Paseo de los Olímpicos en la Avenida Pellegrini de Rosario.
Junto a su tío Zenón trabajando en los talleres del Ferrocarril Central Argentino.
Octavio atajando para la selección Argentina en 1920.
Octavio con la selección en cotejo ante Bolivia.
Octavio Díaz junto a Gabino Sosa de Central Córdoba, tapa de El Gráfico en 1927.
Con la selección Argentina en 1927; Octavio, con camiseta negra.
De derecha a izquierda: Raimundo Orsi (futbolista de Argentina), Carlos Moscoso (futbolista de Perú), Consolato Nai Foino (árbitro argentino), José Vanzzino (futbolista de Uruguay), Octavio Díaz (futbolista de Argentina) durante una presentación previa a un partido del Campeonato Sudamericano 1927.
Octavio detiene un penal ante Egipto, en los JJ.OO. de Amsterdam 1928.
Rosario Central 1919. Parados: Patricio Furlong, Patricio Clarke, Octavio Díaz, Rodolfo Mulhall, Jacinto Perazzo, Florencio Sarasíbar; sentados: Antonio Blanco, Ernesto Guaraglia, Harry Hayes, Ennis Hayes, Antonio Miguel
Rosario Central 1924. Parados: Octavio Montiquín, Domingo Izaga, José De Benedetti, Octavio Díaz, Jacinto Perazzo, Félix Sarasíbar; hincados: Sandalio Arias, Antonio Macías, Harry Hayes, Luis Indaco, Bautista De Benedetti.
Rosario Central 1927. Parados: Serapio Mujica, Francisco de Cicco, Félix Sarasíbar, Octavio Díaz, Florencio Sarasíbar, José Fioroni; hincados: Armando Bertei, Arturo Podestá, José Podestá, Luis Indaco, Esteban Indaco.
Equipo de Rosario Central que venció 1-0 el 16 de diciembre de 1928 a Newell's en cancha de éste por el desempate que decidió la Copa Vila. Parados: Arturo Podestá, José Fioroni, Francisco de Cicco, Octavio Díaz, Ernesto Cordones, Félix Romano; hincados: Ricardo Reol, Armando Bertei, José Podestá, Jacinto Retto, Antonio Miguel.
Rosario Central 1929. Parados: Arturo Podestá, Francisco de Cicco, Juan González, Octavio Díaz, Teófilo Juárez, Félix Romano; hincados: Guerino Malacarne, Gerardo Rivas, Marcelo Tamalet, Luis Indaco, Antonio Miguel.
Rosario Central 1931. Parados: Juan González, Alfredo Centeno, Vecioli, Francisco De Cicco, Federico Marconi, Luis Narvaiz, Octavio Díaz; hincados: Salvador Laporta, Gerardo Rivas, Pascual Molina, Luis Indaco, Dethier.
Rosario Central 1931. Parados: Arturo Podestá, Francisco De Cicco, Octavio Díaz, Juan González, Teófilo Juárez, Ernesto Cordones; hincados: Pascual Salvia, Luis Indaco, Ramón Luna, Nazareno Luna, Juan Francia.
Fuentes: Historia en Azul y Amarillo (Carlos Durhand, Diario La Capital, 2010), De Rosario y de Central (Jorge Brisaboa, Homo Sapiens Ediciones, 1996), Lingua Sport, A Gazeta de São Paulo, Torito Casale, 11v11
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